Gracias a todos los beneficios que tiene en cuanto al ancho de banda y velocidad de transmisión, la fibra óptica ha llegado a todo tipo de ambientes e industrias, por lo que se ha tenido que adaptar a una gran cantidad de circunstancias.

En muchos casos, esta adaptabilidad de los cables de fibra óptica ofrece ventajas sobre otros medios de transmisión, ya que le permite tener un mejor desempeño en ambientes con requerimientos muy específicos. En el caso del sector industrial, por ejemplo, donde los medios de transmisión que trabajan con señales eléctricas o que cuentan con elementos metálicos, pueden llegar a ser vulnerables ante la interferencia electromagnética, producidas por máquinas y motores, existen diversas alternativas de cables de fibra óptica inmunes a este tipo de problemas.

Aún más, en ambientes donde se trabaja con sustancias volátiles, cerca de gasoductos o refinerías, es importante contar con un medio de transmisión que no presente riesgo de generar arcos eléctricos que pudieran causar una explosión. Los cables dieléctricos, son la solución especialmente diseñada para este tipo de ambientes, ya que, al no incluir elementos metálicos, eliminan riesgos asociados a la electricidad.